A partir del 1 de junio RIU Hotels & Resorts ofrecerá a sus clientes pajitas compostables en sus hoteles de España y Portugal; y un mes más tarde lo hará en Cabo Verde. Asimismo, RIU espera incorporar estas pajitas biodegradables en sus hoteles de América en 2019. La iniciativa que ha surgido del departamento de Compras de la cadena hotelera y su colaboración con el proveedor Emicela, supone la sustitución absoluta de todo el género anterior por estos envases más sostenibles, con el fin de apoyar el ahorro de CO₂, eliminar residuos y proteger el medio ambiente.

Estas pajitas que ya pueden encontrarse en los más de 34 hoteles RIU en Canarias, Andalucía, Baleares, Madeira, isla de Sal y Boavista en Cabo Verde, son 100% biodegradables y además se compostan, es decir se degradan en contacto con el resto de residuos orgánicos convirtiéndose en compost o abono. Según las condiciones de humedad y temperatura el tiempo de degradación varía, pero en condiciones normales lo hace en 40 días y sin dejar residuos visibles ni tóxicos. Todo un logro si se tiene en cuenta que una pajita común tarda unos 500 años en descomponerse.

Para promover el buen uso y la reducción del consumo de las pajitas en los bares y restaurantes de los hoteles, RIU ha modificado el procedimiento de su uso de cara al cliente. De este modo, las pajitas compostables se sirven sólo por petición explícita del huésped a excepción de algunos cócteles en los que son necesarias para su consumo. Además, se está promoviendo el uso de removedores reciclables y se ha informado al staff de bares y restaurantes de que las pajitas deben tirarse al contenedor de residuos orgánicos para su posterior compostaje.

RIU Hotels se adelanta con esta iniciativa al plan presentado por la Comisión Europea esta misma semana para prohibir la venta de pajitas, platos y cubiertos de plástico; una propuesta que deberá ser aceptada por el Europarlamento y los Gobiernos de la UE. Asimismo, el Gobierno de Baleares también ha presentado un anteproyecto de ley de Prevención de Residuos para eliminar los artículos de un solo uso de plástico y que podría entrar en vigor a partir del 1 de enero del 2020. Sería entonces cuando quedaría prohibido distribuir y comercializar las pajitas de bebidas de plástico entre otros envases del mismo material.

En España al año se usan más de 5.000 millones de pajitas, pero en el mundo y al día, esa cifra llega a los 1.000 millones. A pesar de parecer inofensivas e incluso decorativas en algunos cócteles, son consideradas la principal fuente de las basuras marinas suponiendo el 4% de los 8 millones de toneladas de plásticos desechados a nivel mundial.